Porque cuando pedimos un deseo por muy imposible que nos parezca estamos contemplando la posibilidad de que se haga realidad.
Porque nos ilusionamos cuando soñamos o imaginamos algo aunque no creamos que se pueda realizar.
Porque la espera a que algo pase también nos hace felices.
Porque la felidad es todo aquello que ocurre mientras intentamos alcanzarla.
Porque la felicidad son las pequeñas cosas no los grandes acontecimientos.
Por todo eso pide un deseo... y quien sabe...
Yo-misma
Etiquetas: Notas Tristes